Estos días de confinamiento me están llevando a encontrarme conmigo misma de nuevo.
De repente, es como si buscase en un gran baúl, y saliesen todas aquellas pequeñas cosas que algún día formaron parte de mí y que estuvieron totalmente olvidadas.
Y así, poco a poco, rebuscando me he encontrado de nuevo ganchillando, bordando y cuidando esas plantas que tan feliz me hacen.
Para los que no me conocéis, os diré que en mi vida siempre, y cuando digo siempre, es así, el amor por la naturaleza y por las pequeñas cosas han sido mi bandera.
Me he criado viendo a mi madre coser y eso será algo que siempre llevaré guardado en la retina. Recuerdo que nos sentaba, a mi y a mis hermanas a su lado, nos ponía un trozo de tela en las manos para que estuviésemos entretenidas y así evitaba que nos pusiésemos a correr por el pasillo de casa como locas.
Sé que a muchos de vosotros os resultará extraño, pero yo pertenezco a una generación en la que la costura y el bordado formaban parte de las materias escolares.
La pasión por la naturaleza, realmente no sé en que momento surgió, pero si busco en ese baúl, estoy segura que saldría la voz de un hombre que nos enseñó a toda una generación el respeto por el medio ambiente, Félix Rodríguez y su programa de televisión. Él llenaba, e hipnotizaba con su voz, miles de hogares españoles, haciendo crecer en todos nosotros la pasión y el cuidado por la naturaleza.
Supongo que las escapadas de fin de semana a la aldea, también contribuyeron en gran medida.
Aquellos pequeños viajes presentaban una gran cantidad de nuevas y emocionantes sensaciones. Cada fin de semana era una nueva aventura y ansiábamos que llegase el momento de ir.
Para unas niñas que vivían rodeadas de asfalto, coches y edificios, aquellas escapadas al campo representaban la libertad, además nos dejaban hacer un motón de cosas nuevas y divertidas.
Poco a poco, aquellas escapadas se fueron distanciando, pero dieron paso a otras aventuras que hicieron aumentar el amor por la naturaleza y sus gentes. Personas que formaron y forman parte del pueblo, que tuvieron que aprender por si mismos la manera de subsistir, que aprendieron a hacerse las prendas con las que vestirse, a plantar aquello que más tarde les proporcionaría calor y alimento, que construyeron sus propias viviendas y que además cuidaron y amaron la tierra, nuestra tierra.
Personas que forman parte de nuestras raíces.